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La obra contempla varios temas; el autor en su visión narra la existencia de un gran planeta, y que su acercamiento a la Tierra generará impacto en todo lo que conocemos. En cuanto a los ensayos atómicos en el océano, el autor comparte desde su percepción el peligro mortal y destructivo que son estos ensayos, provocando maremotos, terremotos y la contaminación de la vida del mar y los animales que habitan en él con todas sus consecuencias.
También habla sobre los extraterrestres en una narrativa comparativa con la tierra; describiendo un estilo de vida armónica, compartida y llena de valores, en un mundo idílico, donde se usa la tecnología para el bien común y en donde la religión es el respeto mutuo a la vida y los demás.
En un capítulo al que llama La Muerte, invita a ver los defectos psicológicos (ego) en cada uno de nosotros, dándole gran relevancia a descubrirlos en los pequeños detalles de la vida cotidiana; haciendo una valoración o semejanza con lo que son o representan las raíces diminutas de un árbol en cuanto a su alimentación y sustento. Entrega en este contexto, una acción o fórmula para un cambio radical.
Concluye la obra tratando sobre el mundo de los sueños; cuerpo astral y/o plano astral, donde no existe el peso ni las distancias, sobre el que nadie se detiene a pensar o reflexionar. Expone que todos podemos conseguir ser conscientes en este plano o dimensión.En la nota final, hace un llamado a ir, a estar, más allá de teorías y discusiones invitando a experimentar y a lanzarse a trabajar en la desintegración de los defectos o yoes psicológicos.